Los productos forjados hechos a mano son estéticamente atractivos y elegantes, por lo que a menudo se usan para decorar puertas, portones y portones de metal o madera. Las falsas asas forjadas encajan armoniosamente en cualquier estilo arquitectónico, complementando con el sabor único de siglos pasados.
Si desea hacer falsas asas originales mediante forjado en caliente, puede hacerlo usted mismo; esto no es gran cosa. Para trabajar, necesitará un martillo y un yunque, así como amoladoras angulares y una máquina de soldar. Del material utilizaremos una placa de 27 cm de largo y 4 cm de ancho, bolas de acero y una barra cuadrada.
El proceso de fabricación de plumas forjadas
En la superficie de la placa, pegamos una plantilla de papel (cuál es más parecida), dibujamos contornos y cortamos el blanco con un molinillo. Luego lo calentamos en rojo con un quemador de gas o en un fuego ordinario, y luego lo golpeamos con un martillo pesado, dando a la superficie de la pieza de trabajo la textura deseada.
Por ejemplo, la superficie de metal se puede decorar con "úlceras de la época": este tipo de textura tiene una gran demanda en el campo de la forja artística, lo que da a los productos el efecto de la antigüedad. Luego, giramos la barra cuadrada de acero o usamos una "coleta" ya hecha y la doblamos bajo un radio pequeño.
Primero, soldamos bolas de metal a la placa, y para ellos ya hay una barra de acero doblada. En los bordes de la placa perforamos agujeros para sujetarlos a la hoja de la puerta o al portillo. La superficie del mango forjado terminado está cubierta con pintura. Como puede ver, hacer una obra maestra tan pequeña no es nada difícil.